La historia de la saga de El cementerio de los libros olvidados prosigue con unos personajes que ya nos resultan conocidos, Daniel Sempere y Fermín Romero de Torres. Tras toda la vorágine que supuso descubrir los secreto de una Barcelona en guerra y la historia de uno de sus escritores malditos, la familia Sempere prosigue su día a día en la librería familiar pensando que, por fin, los fantasmas del pasado han quedado atrás. Pero si algo nos han enseñado los libros de Zafón es que siempre hay un secreto nuevo y oscuro que descubrir y una historia con dos caras de la que queremos saber todos los detalles.
He de reconocer, que cuando leí la descripción de este personaje en el libro, mi memoria viajó irremediablemente a obras previas del autor, El juego del Ángel y Marina. Me gusta mucho como Zafón se embebe de sus historias previas y como en cada nueva novela nos encontramos con guiños a alguno de sus trabajos anteriores.
El prisionero del cielo es más bien una novela de transición, de ensamblaje entre las dos historias previas que ya conocemos de la saga y el apoteósico final que se espera para este año. En esta historia conoceremos la historia de Fermín, o al menos sus partes más truculentas, pero también podremos ir viendo pinceladas de cómo van encajando las novelas anteriores entre sí. Como bien dice el autor al principio de la novela, esta saga puede leerse en el orden que queramos o, simplemente, leer alguno de sus libros de manera independiente; pero si hemos leído todos los libros en el orden preestablecido, esta novela nos sacará alguna sonrisita y algún "oh" al ver como las piezas del puzzle van encajando y como lo que parecía ser una trama simple, es en realidad una historia muy compleja.
Como todas las novelas de Zafón, la historia tiene un lenguaje y una prosa que te atrapa, te envuelve y no te suelta. Con el lenguaje poético que le caracteriza al autor, vamos viendo como las páginas va fluyendo una a una casi sin enterarnos y, cuando quieres darte cuenta has acabado ya la novela sin apenas proponértelo.
Quizá lo que menos me ha gustado ha sido que al leer la novela, he sentido que le faltaba acción, una trama principal fuerte. Al ser una novela puente entre todas las historias previas he sentido que la trama tocaba muchos palos y a la vez ninguno,y es que quien mucho abarca poco aprieta. De este modo vemos que lo que parece ser una trama principal con aquel extraño, es tan sólo una pincelada de unas pocas páginas que te deja con la miel en los labios y las ganas de una verdadera historia alrededor del hombre de aspecto terrorífico que entra en la librería Sempere.
Quizá lo que menos me ha gustado ha sido que al leer la novela, he sentido que le faltaba acción, una trama principal fuerte. Al ser una novela puente entre todas las historias previas he sentido que la trama tocaba muchos palos y a la vez ninguno,y es que quien mucho abarca poco aprieta. De este modo vemos que lo que parece ser una trama principal con aquel extraño, es tan sólo una pincelada de unas pocas páginas que te deja con la miel en los labios y las ganas de una verdadera historia alrededor del hombre de aspecto terrorífico que entra en la librería Sempere.
Hola^^
ResponderEliminarTengo aún La sombra del viento pendiente de leer, a ver si me pongo pronto con el que estoy segura de que será una lectura muy grata.
un besote
Tiene muy buena pinta, no descarto leerlo :)
ResponderEliminar¡Hola!
ResponderEliminarHace un montón que no leo nada del autor, desde La sombra del viento, que ya lo tengo algo olvidado pero no me importaría seguir con la trilogía, porque por lo que he oído son bastante independientes.
¡besos!